Para prevenir que decaiga el interés por aprender COSAS NUEVAS e inspirados por lo que significa el 24 de marzo en Argentina, DÍA NACIONAL DE LA MEMORIA POR LA VERDAD Y LA JUSTICIA , queremos enfatizar la importancia de la memoria narrativa y el impacto que tiene en el aprendizaje.
Cuentan que:
“El Día Nacional de la Memoria por la Verdad y Justicia es una fecha en la que se conmemora y busca mantener vivos en la reflexión y memoria social los tristes acontecimientos producidos en la última dictadura militar. No con el objetivo de depositar una visión estática sobre aquella etapa tan oscura, no con el objetivo de perpetuar un ánimo social irreparable, no con la intención de vivir con la mirada puesta en el pasado… Pero sí con el objetivo de tener presente los errores cometidos y las consecuencias terribles que de ellos pueden desprenderse, sí con el objetivo de una consciente muestra de respeto por las familias víctimas de la desaparición de un hijo, una hija, una nieta o un nieto, sí con el objetivo de buscar justicia y dar luz a los acontecimientos que tuvieron lugar en aquella triste etapa de la historia argentina.”
(materiales de interés http://www.mendoza.edu.ar/24-de-marzo-qdia-nacional-de-la-memoria-por-la-verdad-y-la-justiciaq/ )
Éste, lamentablemente, es un episodio más de la historia y al que le hemos encontrado un especial valor por la propuesta educativa que han creado al respecto. España no se queda corta en acontecimientos históricos, lo que nos preguntamos es que han hecho con ello hasta el momento.
Los actos de habla (Austin,1962, Searle,1969) ponen al descubierto que muchas realidades sociales lo son únicamente en virtud de la palabra. Por ejemplo: ¡Culpable! (veredicto de un juez o jurado), “Os declaro marido y mujer “(consagra un sacerdote o un juez), y tienen efecto por tener un respaldo institucional.
¿Qué ocurre con “Estado de alarma; confinamiento” actual? ¿Qué es lo que se consigue al proferir un enunciado así?
Hay un periodo en el tiempo conocido de forma generalizada como periodo de adaptación, al cole, a un trabajo, situación afectiva, a la altitud … PERO ¿Adaptarse a “un estado de alarma “?
Dice Gueshe Kelsang Gyatso: “Esperar que una mera comprensión intelectual nos ayude a solucionar nuestros problemas es como pretender que una persona enferma se cure leyendo instrucciones médicas sin tomar la medicina».
Así que en nombre de la ciencia, que dice que nuestro cerebro es uno de los órganos más activos, que nuestro corazón bombea aprox. un 20% de nuestra sangre a nuestro cerebro donde se usan el oxígeno y la comida y que cualquier condición que altere este proceso priva a nuestro cerebro de conseguir los nutrientes que necesita para funcionar bien, continuamos en la tarea de diseñar contenidos para nutrir al cerebro.
Hoy nuestra sugerencia de menú: https://elpais.com/sociedad/2019/03/20/actualidad/1553105010_527764.html
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